El entrenamiento híbrido está ganando cada vez más protagonismo. ¿Por qué? Porque mezcla lo mejor de dos mundos: la resistencia cardiovascular y la fuerza muscular. En Redfield T&F lo aplicamos como una fórmula dinámica y efectiva que desafía tus límites y te convierte en un atleta más completo.
¿Cómo se entrena?
Una sesión híbrida combina bloques de carrera (sprints, tramos de 500-1000m, carreras en cinta o exteriores) con ejercicios de fuerza como sentadillas, peso muerto, press o trabajo con kettlebells. Todo en un formato tipo circuito o con descansos activos, manteniendo el ritmo elevado.
Ventajas del híbrido
- Ganas resistencia y fuerza al mismo tiempo.
- Mejoras tu capacidad de recuperación y tolerancia al esfuerzo.
- Quemas grasa de forma más eficiente gracias al estímulo combinado.
- Potencias tu físico y mentalidad con retos funcionales y variados.
Es el tipo de entrenamiento perfecto si te interesan desafíos como carreras híbridas, carreras con obstáculos o simplemente quieres sentirte ágil, fuerte y resistente en tu día a día. No necesitas ser un corredor experto ni un levantador avanzado. Adaptamos cada sesión a tu nivel.
¿Quieres correr más rápido? ¿Levantar más peso? ¿O simplemente entrenar con propósito? El entrenamiento híbrido puede darte todo eso… y más.